Sin duda alguna, con ese cuerpo meticulosamente cuidado y esa mirada tan desafiante como interesante este hombre consigue engancharnos muy fácilmente. Sí, engancharnos, embobarnos... abrirnos la mente dando paso a nuestra imaginación, y cómo no a nuestras ganas de hacerle el mejor de los reconocimientos. En fin, que con dicho personaje ¿a quién no le suben los calores? Yo necesito una estufa de estas, que me lo traigan ya, por favor…
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