Pues sí, este chico lo tiene todo. Y cuando digo todo es todo. Parecerá típico decirlo, siempre todos son inmejorables, pero es que esta vez es peculiarmente cierto. Este solete de muchacho es asombrosamente guapo, pues resulta realmente agradable de mirar con gafas, sin ellas, con todo tipo de sombreros o sin ellos, con barba o sin ella, con ropa… ¿y sin ella? Mejor no pensarlo…En fin, que gustín se siente al observar a este tipo. Nunca un apellido nos desveló tanto de su dueño. ¡Ah! Por cierto ¿y su voz?...uf, mejor que os lo muestre él.
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